Estimadas pupilas:

A los hombres no les gustan las cosas fáciles.Rafting, puenting, balconing, ¿pikolining?.Si, queridas antoñitas, todo acaba en ing y les hace sudar.Las 3 primeras actividades requieren una concienzuda preparación y equipo adecuado, bueno quizás en el caso del balconing con llevar ropa interior se considerará suficiente.

En el pikolining se deberán respetar escrupulosamente la ley de las 5 cenas, para ponerlo por lo menos al mismo nivel que estar en riesgo de acabar como un tomate aplastado en el fondo de un barranco.

Pero sabemos que la carne es débil y a veces queremos sucumbir al fuego de la pasión después del primer gin tonic que compartimos ( si hay que zozobrar por lo menos que haya mediado un solomillo entre vosotros).Para mantenernos firmes en nuestras convicciones nada mejor que utilizar un cortafuegos, que son aquellas técnicas que os impiden ceder rápidamente.Personalmente, creo que la más efectiva es llevar las ingles del tamaño de la cabellera de la Pantoja así bien pobladitas que el chico en cuestión debería ser Indiana Jones para adentrarse en esos lares.Otra técnica adecuada puede ser ponerse bragas y sujetador color carne con blonda, si chicas de esos que se compran en el Mercadillo de los Miércoles, que el vintage todavía no está bien visto en estas intimidades.

Para las descarriadas recalcitrantes coged una guindilla y ya sabéis lo que tenéis que hacer.

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