Estimadas pupilas:

La vida es como el mundo de Barbie primero empiezas con ella, luego le añades algún vestidito para lucir, le compras a Ken ( que los vestiditos no han sido en vano) y por último si te hace especial ilusión el deportivo biplaza, en caso de que seas más campestre aceptamos la caravana.

A eso es a lo que se llama orden de prelación, o ir pasito a pasito. Luego tenemos a las antoñitas impacientes, que se entrampan con una hipoteca de un piso de tres habitaciones que a duras penas pueden pagar porque claro ellas ahora son solteras, pero tienen clarísimo que quieren casarse y tener dos hijos y por supuesto no van a tirar el dinero con un apartamento de 40 m porque ese no es su plan de vida.

Y la vida pasa y el euribor sube y la carestía de la hipoteca conlleva recortar en vestiditos, peluquería y salidas y sustituirlos por tinte del Mercadona y Trivial de Sábado por la noche y  claro el piso lo tienes pero falta Ken y llega el fatídico día en el que llevas a casa a un hombre que conociste en el super ( donde si no) pero todo parece decaer inexorablemente al ver él con sus ojitos una habitación con dos literas y un peluche de Bob Esponja.

En fin antoñitas, debéis ajustaros a vuestra situación actual y si estáis sólas lo que ahora toca es poner los medios para dejar de estarlo que la hipoteca del piso de tres habitaciones es más llevadera entre dos.

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